Sustentabilidad e innovación: la granja flotante de Rotterdam
¿Alguna vez imaginaste que pudiera existir una granja flotante? Seguramente no y es que ¡sólo existe una en el mundo! Se encuentra en Rotterdam y sus prioridades son: el bienestar animal, la sostenibilidad y la innovación. ¿Quieres conocer más sobre este fascinante proyecto? Aquí te contamos todo.
Nos enfrentamos a un escenario muy preocupante con respecto a la crisis ambiental. Cada vez es más común escuchar sobre catástrofes naturales o sobre la escases del agua, pero no todo está perdido. Alrededor del mundo existen diferentes proyectos innovadores y sustentables que buscan mejorar las condiciones ambientales. Tal es el caso de “Floating Farm”, un proyecto que busca acercar las granja a las grandes ciudad es, como parte de una transformación urbana limpia, habitable y consciente.
¿Qué es floating farm?
Floating farm es la primer granja flotante del mundo. Se trata de una iniciativa que pretende acercar los alimentos al consumidor de una manera sustentable y respetuosa con el medio ambiente. Se encuentra en la ciudad de Rotterdam y pretende acercar los alimentos al consumidor de una manera sustentable y respetuosa con el medio ambiente.
Este proyecto desarrollado por el estudio holandés Goldsmith es, en esencia, un edificio agrícola basado en principios náuticos. Se trata de una granja flotante que alberga aproximadamente a 40 vacas lecheras y que está instalada en la zona M4H del puerto de Rotterdam, un sector cuyo objetivo es estimular actividades innovadoras y experimentales.
En el piso superior de la fábrica se combina el procesamiento de la leche y el yogurt, así como un espacio destinado a la comercialización. El proyecto contempla además una galería desde donde los visitantes pueden participar de un recorrido educativo sin perturbar la rutina de la granja.
¿Por qué una granja flotante?
De acuerdo con su sitio web oficial (https://floatingfarm.nl), la idea de una granja flotante se debe al acelerado crecimiento urbano de se vive en todo el mundo. Según su descripción, se espera que en Europa el 90% de la población se mude a las grandes ciudades, o por el contrario, que la mancha urbana siga creciendo hacia los lugares rurales. Entonces las ciudades crecerán y serán construidas en donde la tierra es naturalmente fértil. Con el crecimiento de las ciudades, el suelo aún más fértil se convertirá en hormigón y las líneas de transporte desde las zonas agrícolas hasta el centro de la ciudad serán cada vez más largas. Por tanto, la cadena logística y, por tanto, la contaminación dentro de las ciudades seguirá creciendo de forma significativa. En ese sentido, es necesario crear proyectos que acerquen la producción de los alimentos a las grandes ciudades.
Consumo ético
Este proyecto promueve el comercio justo y el consumo ético, pues busca acortar las cadenas de producción. Para los socios, es importante que se reduzcan los gastos ambientales de transportación, por ello acercaron un farmacia a una gran urbe como lo es Rotterdam.
Eso no es todo, el Floating Farm apuestan por el bienestar animal, por ello ofrecen las condiciones óptimas para que las vacas puedan disfrutar su estadía ahí. De hecho, en su página mencionan que le ofrecen a las vacas un lugar para dormir y descansar.
“Las camas para las vacas están hechas de materiales flexibles y resistentes que se pueden ajustar a los deseos de la vaca. Además de estas camas para vacas, también se utilizan otros productos Easyfix para satisfacer todas las necesidades de las vacas”. Además mencionan que estos animales son alimentados con residuos de productos orgánicos de la ciudad. Por ejemplo, consumen granos usados de varias fábricas de cerveza de Rotterdam, salvado de los molinos de viento de Schiedam, pasto de los campos deportivos cercanos y cáscaras de papa de un procesador local.
Sus productos
El resultado de todo este innovador proyecto son productos locales de calidad, y lo mejor de todo, sustentables. Entre otras cosas, floating farm comercializa leche, yogurt y manteca.
Su leche no contiene aditivos ni conservadores y la puedes encontrar en presentaciones de 750 ml o 250 ml. Además, sus yogures tampoco contienen ningún tipo de aditivo y cuentan con presentaciones de un litro.
¿A dónde van los residuos generados?
Una de las mayores preocupaciones con respecto a este proyecto son todos los residuos orgánicos de las vacas (el estiércol y la orina), pues en muchas granjas, estos residuos pueden contaminar seriamente los mantos acuíferos y además generan grandes cantidades de amoniaco. Pero en floating farm no es así. Los socios de esta empresa han logrado construir un sistema en donde la mayoría de los residuos son reutilizados. ¿Cómo lo hacen? Pues, han aplicado un nuevo tipo de suelo de goma. Ahí, el estiércol y la orina permanecen un tiempo y son absorbidos inmediatamente por un robot de estiércol, retirados y procesados a la siguiente fase utilizable. De esta forma, convierten el estiércol en materia prima fértil para plantas, parques y hortalizas.
